Asociación Torrijos 1831.
La inmensa mayoría de las personas que viajan por la carretera Nacional 340, en dirección a Tarifa, pasan por unos llanos, anteriores a Facinas, desconociendo la historia escrita en esos parajes, en el agitado año de 1820. Hoy, en una parte de los llanos, junto a la carretera N-340, existe el pueblo blanco de colonización, levantado en 1944 y denominado Tahivilla. En esos llanos, así como en los altos de Rentín, donde hemos estado, tuvo lugar un enfrentamiento entre las tropas constitucionalistas de Rafael del Riego y las absolutistas mandadas por el general José O´Donnell, que relatamos a continuación.
Los antecedentes.
Una vez que los jefes pronunciados en enero de 1820, a favor de la Constitución de 1812, pudieron sentirse seguros con sus tropas en San Fernando, se tomó la decisión de formar una columnas que, mandada por Rafael del Riego, fuera proclamando en diferentes en diferentes localidades de Andalucía, la citada Constitución, ya que encerradas las tropas liberales en la Isla de León no podrían proyectar los fines políticos de levantamiento. Así Riego (ya ascendido a general), partió de San Fernando el día 27 de enero, acompañado por los gritos de “¡Constitución o muerte!”. Con el excesivo nombre de la I División de las tropas nacionales, salió esta fuerza que, realmente, no alcanzaba el número para ser divisionaria, pues en total la formaban 1.500 hombres, integrados por los batallones, Asturias, Sevilla (menos la compañía de Granaderos), Guías, dos compañías de Valencey, y cuarenta caballos montados por artilleros, para actuar como caballería. Riego pasó Chiclana, sin detenerse, alcanzado después Conil y, más tarde, Vejer de la Frontera, donde consiguió apoyos entusiastas y medios. De allí saltó al camino que, ahora, cubría la vía medieval de La Trocha, y entrando por los Barrios, alcanzó Algeciras el 31 de enero, ciudad que se volcó en agasajos y acomodos para la columna liberal. Además, la cercanía de su puerto con el de Gibraltar, hizo proveerse a los nacionales de abundantes medios y dinero, enviados en gran parte desde Buenos Aires, por los independentistas. Enfrente, en San Roque, el general absolutista O´Donnell, que esperaba por los refuerzos pedidos a Sevilla, poder superar a las tropas de Riego en número, para atacarle con garantías, quedó inmóvil al ver a los liberales cubiertos tras las murallas de Algeciras. Todo cambió, cuando Riego recibió la petición por carta de Quiroga, de que regresara a San Fernando, donde se le necesitaba con sus hombres. La columna de Riego partió de Algeciras el 7 de febrero, en dirección a Vejer, llevando con ella todos los recursos que habían conseguido en aquella villa.
El enfrentamiento en los llanos de Tahivilla.
Como Riego estaba enterado de los sucesivos refuerzos que su rival, el general absolutista José O´Donnell, había recibido de Sevilla, con un incremento notable de caballería, decidió salirse del itinerario de la ruta antigua de La Trocha, donde sería más vulnerable en caso de ser atacado. De esta manera, los integrantes de la tropa nacionalista tuvieron que afrontar una difícil marcha a través de sendas abiertas, en los riscos, por los pastores, y sortear en bajadas y subidas los cerros rajados, hasta alcanzar el lugar del cortijo del francés, donde acamparon y repusieron fuerzas. Ante ellos se abría ya la amplia llanura de Tahivilla. Riego ordenó marchar de nuevo, a las cinco de la madrugada del día 8 de febrero. A eso de las seis, las vanguardias nacionales vieron una amplia columna de caballería, enemiga, de unos ochocientos jinetes, que bajaba de una loma a la izquierda de su frente. Pese al peligro que suponía el empleo de la caballería en un llano, Riego no se intimidó, y mandó hacer alto a los tres batallones que llevaba consigo, para establecer cómo marcharía a continuación la fuerza nacional. Puso al mando de la vanguardia, al comandante Gurrea (que sería fiel amigo de Torrijos), dirigiendo a las compañías de cazadores, de Valencey y Guías, en formación de guerrilla. La impedimenta y cargas, con el tren de mulas, a la derecha del batallón Sevilla, en su parte de la cola. Finalmente, la retaguardia al mando de teniente coronel Roque de Arizmendi, con las compañías de cazadores de los batallones, Asturias y Sevilla. Así, la columna nacional continuó su marcha, sin descomponerse, mientras la tropa gritaba “¡Viva la Constitución!” y “¡Viva la Patria!”. Se dio orden entonces de que sonaran los tambores, entonando los soldados la canción patriótica que habían ensayado en Algeciras:
Soldados la Patria
Nos llama a la lid,
Juremos por ella
Vencer o morir…
Henchían sus pechos, pues no se consideraban ya los soldados exclusivos de una dinastía, tal como estuvo establecido en el Antiguo Régimen absolutista, sino de una nación entera, su patria llamada España. La vanguardia nacional disparaba a distancia a la caballería enemiga, y esta también respondía. Pero la columna continuaba su avance por los llanos de Tahivilla. Riego, cuya idea era llegar a las alturas de Rentin, donde podría defenderse mejor su infantería, decidió ganar tiempo, mientras continuaba su marcha, sin pararse en ningún momento. Envió un emisario a la caballería absolutista, diciéndole que aquel tiroteo no tenía sentido, y sólo se iban a producir muertos por ambas partes. Los absolutistas aceptaron la propuesta. Ahora la cosa cambiaba, y mientras los nacionales continuaban su marcha a Vejer, la caballería absolutista les siguió detrás, sin cerrarle el camino. Uno de sus escuadrones, se desvió a la izquierda de la retaguardia liberal, y rompió fuego contra la tropa de Riego, que respondió también con descargas, haciendo ocho heridos a los jinetes, que salieron despavoridos. A poco de esta escaramuza, los mandos de O´Donnell pidieron parlamento para, a continuación, ofrecer el perdón en nombre del rey para sargentos y tropa, si entregaban a sus jefes. Pero los soldados nacionales respondieron con valentía, que Riego era su jefe, entonando a continuación el canto del himno patriótico que elevaba su moral. Ya habían llegado a los altos de Rentín, y con ese respaldo, Riego desplegó a toda su fuerza, en línea. Esa imagen impactó a la caballería absolutista que, intimidada, se retiró definitivamente. Un sargento y ocho jinetes se pasaron a los nacionales. Con valor y serenidad, la columna de Riego dejó inmóviles a los absolutistas. Los nacionales hicieron el resto del camino que les quedaba, llegando sin más contratiempo a Vejer.
Datos de la Asociación Histórico Cultural Torrijos 1831.
Tipo de Asociación: cultural, dedicada a la investigación histórica, y recreadora en sus actuaciones en público para exponer los hechos que representa. Ámbito de actuación: regional, recogida en el Registro de asociaciones de la Junta de Andalucía. Inició su periodo constituyente en el año 2002, siendo legalizada en 2003. Fue un proyecto original desde el principio, pues en España no se había creado anteriormente una Asociación sobre el personaje histórico de José María Torrijos y Uriarte, héroe de la Guerra de Independencia y defensor de las libertades y derechos constitucionales frente al poder absoluto del reinado de Fernando VII. Original en las formas, dedicación y fines, que recogen sus estatutos, cimentando sus antecedentes en los precursores que trabajaron sobre el personaje de Torrijos en la provincia de Málaga, en las décadas de los años ochenta y noventa del siglo XX y primeros años del XXI.
Como colectivo de recreaciones históricas, es el más antiguo de las dedicadas al siglo XIX, en Andalucía. En cuanto a las representaciones relativas a la Guerra de la Independencia en las que participa la Asociación, la recreación insignia, creada en 2007, es el “Regimiento de Infantería de Málaga”, unidad titular de Málaga que, salvo un periodo de disolución, tuvo vida castrense desde 1701 a 1893, siendo su historial heredado por el Regimiento Melilla en sus diferentes numeraciones, y que fue disuelto en Málaga, en 1985. Para entrar en su historial y actividades: regimientodeinfanteriademalaga.blogspot.com
Correo de Contacto: asociacióntorrijos1831@gmail.com También. A través del mismo se solicitan las visitas concertadas al Centro de Interpretación Histórico José María Torrijos (Refectorio), en el barrio de El Perchel de Málaga. Teléfono de contacto: 952234039. Página web: www.torrijos1831.com